Los niños de Son Gotleu tienen un buen motivo para sentirse orgullosos. El dinero que recaudaron el día de Sant Jordi con la donación de libros por un euro ha servido para apadrinar a Jainaba Jallow, Basiru Danso, Mariamma Fadera, Madami Bayo, Domitín Manga y Musu Darry. Son seis chicos y chicas de 9 a 14 años que viven en Gambia (África) en unas condiciones que los pequeños palmesanos no pueden ni imaginar. Los chavales de las etnias Fula y Mandinka trabajaban con sus familias o solos en los vertederos de las afueras de los lugares turísticos, aunque ahora tienen la oportunidad de ir a la escuela gracias a los 627,15 euros recaudados en Son Gotleu el Día del Libro.
No son los únicos niños gambianos que se han beneficiado de la solidaridad de esta ciudad, ya que los residentes de la Llar d´Ancians realizaron una exposición y una jornada de puertas abiertas para conseguir fondos. Entre ambas actividades sumaron 1.400 euros y, como cada apadrinamiento para cubrir los gastos de acudir a la escuela durante un año cuesta cien euros, en total hay una veintena de nuevos estudiantes en dicho país africano gracias a los jóvenes y los mayores palmesanos.
"Era la primera vez que realizábamos esta actividad en Son Gotleu, aunque dado su éxito seguramente la repetiremos el año que viene", afirma Carlos Vecina, miembro del Proyecto de Desarrollo Comunitario de Pere Garau y Son Gotleu. La idea surgió de la Plataforma de servicios y entidades de la segunda barriada y el objetivo era "hacer una intervención comunitaria con estudiantes de los colegios Es Pont, Joan Capó, Corpus Christi, Sant Josep Obrer y Gabriel Vallseca y del instituto Sureda i Blanes para fomentar el protagonismo de los jóvenes, dar una imagen positiva del barrio y contribuir de forma solidaria con la ONG La Sonrisa de África (Gambia)", como detalla. Y qué mejor que organizar una actividad cultural el Día del Libro. Los niños pidieron a sus padres que les diesen libros usados que tuviesen por casa para hacer un mercadillo, aunque también hicieron donaciones el Ayuntamiento, el Institut d´Estudis Baleàrics y Cáritas.
La plaza Joanot Colom se llenó de alumnos de casi todas las nacionalidades –Son Gotleu es uno de los barrios con más inmigración– y algunos de ellos pudieron sentirse identificados, debido a su origen, con los niños de Gambia que aparecían en la muestra de fotos que también se hizo.
No son los únicos niños gambianos que se han beneficiado de la solidaridad de esta ciudad, ya que los residentes de la Llar d´Ancians realizaron una exposición y una jornada de puertas abiertas para conseguir fondos. Entre ambas actividades sumaron 1.400 euros y, como cada apadrinamiento para cubrir los gastos de acudir a la escuela durante un año cuesta cien euros, en total hay una veintena de nuevos estudiantes en dicho país africano gracias a los jóvenes y los mayores palmesanos.
"Era la primera vez que realizábamos esta actividad en Son Gotleu, aunque dado su éxito seguramente la repetiremos el año que viene", afirma Carlos Vecina, miembro del Proyecto de Desarrollo Comunitario de Pere Garau y Son Gotleu. La idea surgió de la Plataforma de servicios y entidades de la segunda barriada y el objetivo era "hacer una intervención comunitaria con estudiantes de los colegios Es Pont, Joan Capó, Corpus Christi, Sant Josep Obrer y Gabriel Vallseca y del instituto Sureda i Blanes para fomentar el protagonismo de los jóvenes, dar una imagen positiva del barrio y contribuir de forma solidaria con la ONG La Sonrisa de África (Gambia)", como detalla. Y qué mejor que organizar una actividad cultural el Día del Libro. Los niños pidieron a sus padres que les diesen libros usados que tuviesen por casa para hacer un mercadillo, aunque también hicieron donaciones el Ayuntamiento, el Institut d´Estudis Baleàrics y Cáritas.
La plaza Joanot Colom se llenó de alumnos de casi todas las nacionalidades –Son Gotleu es uno de los barrios con más inmigración– y algunos de ellos pudieron sentirse identificados, debido a su origen, con los niños de Gambia que aparecían en la muestra de fotos que también se hizo.
Proyecto de futuro
La autora de dichas fotografías es Conxi Pou, cooperante y mediadora en la isla de La Sonrisa de África. Cuando estuvo allí, conoció de primera mano la intención de la ONG de desarrollar un proyecto "para que los niños puedan tener más de un año de escolarización y no se vean abocados a la incertidumbre de su futuro. Se trataría de crear un centro donde puedan comer y dormir –muchos son huérfanos–, y donde aprendan un oficio que les permita salir adelante", tal como explica. Sin embargo, todavía no tienen dinero para desarrollar esta idea, por lo que serán necesarias más actuaciones como la de Son Gotleu y la Llar d´Ancians para conseguirlo.
Texto: Raquel Galán
Texto: Raquel Galán
No hay comentarios:
Publicar un comentario