Nadie dijo que convertirse en padres fuera fácil pero muchos nunca hubiéramos imaginado encontrarnos con tantos obstáculos. Cuando uno decide seguir el camino de la adopción para encontrar a su hijo comienza con fuerza, con ilusión, con entusiasmo pero ese ánimo parece ir descendiendo poco a poco a medida de el tiempo pasa y la espera se alarga.
El deseo de la maternidad/paternidad continúa en el fondo de nuestros corazones, pero el trayecto que tenemos que recorrer es a veces tan complicado que en ocasiones nos invade el desánimo, la tristeza, la desesperación y la angustia.
Nadie, solo los que lo han pasado o los que lo están viviendo ahora, se imaginan lo larga que se hace la espera hasta que nos encontramos con nuestro hijo/a.
Al final del camino todos los esfuerzos realizados valen la pena para poder comenzar una nueva etapa con nuestro pequeño. Desde ese momento nuestra vida ha cambiado por completo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario